Mis primeras experiencias con el ordenador

Buenas tardes a todos,

De momento el objetivo se ha conseguido que era escribir todos los días.

En primer lugar tengo que dar las gracias a Alvaro Montoliu por enseñarme cómo me puedo mover en este mundo de la blogosfera.

Gracias a él estoy escribiendo algo en el blog porque ayer lo dí de alta pero como he comentado en otros blogs soy un paleto informático; no me da vergüenza reconocerlo.

Como ejemplo recuerdo que allá, por 1993, fue una de las primeras veces que me enfrenté a ese aparato denominado ordenador.

Entonces contaba con 13 años y mis únicas experiencias con el ordenador se podrían resumir en largas jornadas de PC Fútbol y de un juego que simulaba Indiana Jones y la Última Cruzada.

Tras varios días luchando con la gripe me enfrenté a mi primer examen de informática habiendo asistido sólo a la primera clase en la que no nos explicaron nada del otro mundo.

Como no había ordenadores para todos los alumnos a mí me tocó en la segunda tanda; tras atender con sumo interés cómo hacían el examen mis compañeros de la primera tanda me dirigí tembloroso hacía mi pupitre informático.

No recuerdo muy bien lo que nos mandaron hacer pero a mí nada más sentarme en el ordenador y hacer el primer clik con el ratón me comenzaron a salir carteles en inglés que no me preocupé por intentar descifrar.

OK, OK, OK.....

Finalmente me salió una pantalla en la que el número 1.000.000 fue descendiendo a una gran velocidad.

Como el profesor seguía indicándonos los ejercicios que debíamos ir haciendo levanté la mano para poner al corriente de la situación al profesor.

Él, ignorando lo que estaba sucediendo, se me acercó con una sonrisa de oreja a oreja preguntándome que sucedía.

Esa sonrisa se fue apagando a medida que empezó a ser consciente de lo que el renacuajo de turno había hecho.

"Me has borrado el disco durooooooooooooooooo!!!!!!!!!!!!!"

Yo, movido por la fama que precedía al profesor, comencé a dirigirme hacia la puerta al estilo de "Salvese quien pueda" pero no logré mi objetivo ya que el profesor interceptó mi recorrido y me sacó de la clase cogido de la oreja y con la amenaza de no volver nunca más.

Al día siguiente yo cumplí sus órdenes y no asistí a la clase.

Si ahora me viese con un blog.....